lunes, 28 de mayo de 2018

El Corregidor y la Molin…era




 La figura del corregidor surge en el siglo XIV como delegado del rey en los grandes municipios con jurisdicción sobre la tierra de su entorno, para reconducir hacia el control real a unas administraciones dominadas por autoridades locales, elegidas conforme a sus fueros, que ejercían el poder y la justicia de acuerdo con sus propios intereses y conveniencias particulares. Era el cargo administrativo que unía el nuevo poder absoluto de las monarquías con el poder local de las ciudades. 
El Rey le nombraba como corregidor en las ciudades más importantes con la finalidad de presidir el ayuntamiento y era el máximo cargo en las funciones gubernativas de la ciudad. Alrededor de 1833, el cargo de corregidor empezó a ser menos importante porque se instauraron los gobernadores políticos y se remodeló el sistema judicial.

Alfonso José Marsilla de Teruel conde de Moctezuma, fue nombrado corregidor de Madrid por Fernando VII en 1814 a su vuelta de Francia. Se consideraba heredero de Moctezuma II y por tal motivo intento coronarse emperador de México cuando estaba a punto de independizarse de España, cosa que no consiguió.

Estando  de corregidor en Madrid, se enamoró de la bailarina del teatro de la Cruz Antonia Molino, lo que dio motivo al pueblo de la Villa a desempolvar el antiguo romance del corregidor y la molinera añadiendo algunas estrofas nuevas. Los ciegos vendieron el romance por las calles y plazas gritando: ¡a dos cuartos el romance del corregidor y la molin…era! Se han documentado distintas variantes de este romance en pliegos de cordel de 1821 y 1859.



Ramón de Mesonero Romanos (1803-1882), afirma que este romance es la base sobre la cual construyó Pedro Antonio de Alarcón (1833-1891) “El sombrero de tres picos”.

Finalmente digamos que Alfonso José Marsilla de Teruel, tuvo que dejar el cargo de corregidor de la Villa de Madrid  a consecuencia de la ojeriza que le cogieron los madrileños por prohibir que se echasen perros a los toros que salían mansos en las corridas.





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