miércoles, 27 de julio de 2022

Seguidillas

 



Los orígenes de la Seguidilla (a veces llamada siguirilla) se remontan al siglo XV como forma literaria. Es una estrofa de arte menor que consta de cuatro versos breves, heptasílabos los impares y pentasílabos los pares. Los antecedentes más tempranos se encuentran en las jarchas hispano-mozárabes de los siglos XI y XII, así como en las cantigas gallegas del siglo XIII de Alfonso X el Sabio o Martín Codax :


Mía irmana fremosa,

treides comigo

a la igreja de Vigo,

u é o mar salido

 

Las Seguidillas son piezas instrumentales, cantadas y bailadas, más antiguas y genuinas de España. Están creadas en el ámbito rural español y transmitido de generación en generación, a través de la tradición oral.

En El Cancionero de Palacio, época de los Reyes Católicos, se encuentran las primeras referencias escritas de seguidillas instrumentalizadas. Su uso se hizo muy popular en época de Cervantes e igualmente se incluye en la mayoría de obras de teatro español del siglo XVIII.

El baile de las seguidillas llega a las ciudades y villas en el siglo XVI, aunque sus orígenes se remontan al siglo anterior. Su movimiento es animado, en tiempo movido o alegreto en compases de 3x4 o 3x8. El contenido de sus letras suele ser de tema amoroso, pícaro o jocoso.

Siempre va mala

la primer seguidilla,

siempre va mala

porque sale del cuerpo

avergonzada.

Que tunos son

los labradores,

madre, que tunos son,

las tierras del camino

las harán mejor.

(Seguidillas castellanas de Agapito Marazuela)

Encontramos seguidillas en los cantos y bailes populares de Castilla y León, de Valencia, de Canarias, pero sobretodo en Murcia y Castilla-La Mancha. Aunque todas se consideran seguidillas, la mayoría tienen una estructura diferente, muchas veces acompañadas por instrumentos propios de cada zona (tejoletas, castañuelas, guitarras, bandurrias etc…) 

Las manchegas,  o seguidillas manchegas, podrían ser consideradas las más antiguas de España, genuinas de esta tierra han sido declaradas Bien de Interés Cultural con la categoría de bien inmaterial.

 

 


 

Con el tiempo las seguidillas-con permiso de la jota-, acabarían por implantarse como principal baile español, derivándose de ellas otras danzas como las sevillanas, las malagueñas, el fandango, las boleras, las seguidillas jaleadas,  características de la región de Cádiz y Jerez de la Frontera y, por último, las gitanas o seguirillas.



 Fuentes: Internet y propias