domingo, 15 de diciembre de 2013

El villancico


Las costumbres, tradiciones y canciones que tienen lugar en el periodo navideño en homenaje y alabanza del nacimiento de Jesús, son numerosas y variadas, siendo el villancico  la forma más habitual del canto navideño.
El villancico (parece que viene de "villano”), es una composición popular, generalmente anónima (aunque no siempre como veremos), en verso con estribillo (el número de versos varía entre dos y cinco), que desde la Baja Edad Media se usaba en las zonas rurales españolas, siendo su temática variada: los había morales, religiosos, satíricos... (algunos incluso subidos de tono), pero sobre todo predominaba la temática amorosa en sus muy variadas facetas.

Las primeras fuentes documentales en las que aparece la palabra “villancico” son el Cancionero de Stúñiga (1458) y el  Chanssonier d’Herberay (1463), más posteriores son el Cancionero de la Colombina y el Cancionero musical de Palacio. 
Hacia el siglo XVI debido a que las autoridades eclesiásticas empiezan a considerar la conveniencia de introducir en la liturgia composiciones en castellano como una forma de acercar al pueblo a los misterios de la Fe católica, el villancico poco a poco va cambiando su temática para ir centrándose en temas de tipo religioso y así se empieza a utilizar en las principales fiestas litúrgicas como la Navidad, Asunción, Epifanía, Trinidad, etc.
Tuvieron que pasar años para que en el llamado Cancionero de Uppsala (Venecia, 1556) apareciese un apartado que dice: “Villancicos de Navidad a tres bozes”.

Una de las características más identificativas del villancico religioso popular, es la simbiosis que se da entre  los sucesos de la Historia Sagrada (muchas veces sacados de los evangelios apócrifos) y las costumbres y tradiciones de la zona donde se crea y canta. Así tenemos por ejemplo que los pastores llevan en su zurrón requesón, manteca y vino o la Virgen es lavandera y tiende los pañales en el romero, y a adorar al niño van  molineros, segadores y hasta una burra cargada de chocolate. Este tipo de modificaciones con respecto a la Historia transmitida por la Iglesia se suelen dar desde la Edad Media, ya que por esos años eran muy comunes las representaciones dramáticas que se llevaban a cabo por Navidad.   
  

Ejemplo de estas narraciones medievales es “El Auto del Nacimiento de Nuestro Señor” de Gómez Manrique (tío de Jorge Manrique), que cada año se representa en el Convento de las Clarisas de Calabazanos (Villamuriel, Palencia).Es una representación sencilla con una serie de cuadros escénicos escritos en verso que representan las dudas de José, el Nacimiento del Niño, la Anunciación y la Adoración de los Pastores. Tras los lloros del niño Jesús, finaliza con un villancico para calmarlo titulado “Callad Fijo mío chiquito”, bello ejemplo de los primeros villancicos medievales, escrito también por  el dramaturgo palentino Gómez Manrique (1412-1490), y que es interpretado por las Hermanas Clarisas.

En el siglo XIX la palabra “villancico”  toma el significado actual: forma musical vocal de tema navideño, no litúrgico y con un contenido entre lo religioso y lo profano.













No hay comentarios:

Publicar un comentario