lunes, 25 de agosto de 2014

Ya venimos de la Guerra de África




















Esta canción es una de tantas que sobre la guerra de África se han escrito. Otras nos resultan más conocidas como “El Barranco del Lobo” o “La plaza de Tánger”, utilizadas muchas veces como canciones de corro en los juegos infantiles. Pero hay muchas más que tratan o se originan con dicha guerra.
La Guerra del Rif, también llamada Guerra de África, fue un enfrentamiento originado en la sublevación de las tribus rifeñas (región montañosa del norte de Marruecos) contra las autoridades coloniales española y francesa. Uno de los hechos más destacado fue el desastre del Barranco del Lobo,  acaecido en ese lugar, próximo a Melilla, el 27 de julio de 1909 en la que las tropas españolas sufrieron una dura derrota por parte de los rifeños.

En el barranco del lobo 
hay una fuente que mana 
sangre de los españoles 
que murieron por España. 
Pobrecitas madres cuanto llorarán              
al ver que sus hijos a la guerra van           
 
Ni se lava ni se peina 
ni se pone la mantilla 
hasta que vuelva su novio 
de la guerra de Melilla. 
Pobrecitas madres, cuanto llorarán 
al ver que sus hijos a la guerra van. 

Melilla ya no es Melilla 
Melilla es un matadero 
donde van los españoles 
a morir como toreros. 
Pobrecitas madres, cuanto llorarán 
al ver que sus hijos a la guerra van


Pero la mayor derrota de las tropas españolas  fue El Desastre de Annual. Las tropas rebeldes comandados por Abd el-Krim cerca de la localidad marroquí de Annual, el 22 de julio de 1921, infringieron un duro golpe a los españoles, que según muchos historiadores perdieron a más de 13000 hombres.





























Como ya hemos dicho, el principal cabecilla de las tropas rifeñas fue Abd-El-Krim, al cual hacen mención algunas coplas de la época:

Abd-El-Krim se ha vuelto loco
y lo han metido en un saco,
por entrar en Alhucemas
la quinta del veinticuatro...

La guerra fue en general mal vista y provocó importantes conflictos en la sociedad española (Semana Trágica de Barcelona). La zona del Rif era muy pobre y muchos no comprendían la pertinencia de una guerra tan sangrienta. Por otro lado, las tropas eran de reemplazo, es decir, reclutadas obligatoriamente. Sin embargo, los jóvenes pudientes podían en general librarse del servicio militar pagando a alguien para que fuera en su lugar. Esto reforzaba la idea, cierta al fin y al cabo, de que eran los "hijos de los pobres" los enviados a morir a Marruecos.


Del día seis de febrero    
Nos tenemos que acordar                                        
Que entraron los españoles
En la Plaza de Tetuán.

La plaza de Tánger
La van a tomar
También han tomado
La de Tetuán.

En la Plaza de Tetuán
Hay un caballo de caña,
Cuando el caballo relinche
Entrará el moro en España.

La Plaza de Tánger…

Centinela, centinela,
Centinela del Serrallo
Alerta, alerta, que vienen
Los moritos de a caballo.

La Plaza de Tánger…



Si te vas para Melilla
Avísame a mi primero
Para ponerme de luto
Hasta la cinta del pelo.

El pañuelo que me diste
En Melilla lo encontraron
Con un letrero que dice
La guerra se ha terminado

La guerra se ha terminado
Los militares ya vienen
Con la licencia en la mano
Dime niña si me quieres
Dime niña si me quieres
No me tengas engañado
Que el galán que tu más quieres
Se lo llevan los soldados

Se lo llevan los soldados
Ya no lo vuelves a ver
Y adiós clavel y adiós rosa
Y hasta la primera vez.