miércoles, 27 de febrero de 2013

Las Marzas






Con distintas teorías que sitúan su origen entre el pueblo prerromano y el romanizado tras la conquista, el hecho es que el calendario lunar comenzaba el nuevo año el 1 de marzo. Ese día se escenificaba un ritual conocido como Noche de Marzas.
Joaquín Díaz dice que las Marzas constituyen un género de diversa aplicación, se podían cantar como aguinaldo generalmente la noche de Reyes, como cantos de Cuaresma  y principalmente como canto petitorio y de ronda ante la llegada del mes de Marzo.
En la zona de la Montaña palentina, la última noche de Febrero, se reunían  los mozos del pueblo a golpe de instrumentos de percusión, Iban cantando por todas las casas  pidiendo a los vecinos tocino, chorizo, huevos, morcillas etc.

Las Marzas pedimos honrados caballeros.
Pedimos tocino, chorizos y huevos”

 Si los dueños de la casa se mostraban poco generosos o no abrían la puerta , les cantaban coplas alusivas a su mal comportamiento o a supuestos defectos

“Aquí vive un andrajoso, cara de pocos amigos
con más costra que un piojoso y más bujeros que un cribo”

La misma noche se cenaban lo recaudado y después del café y alguna copita, iban de ronda  a las ventanas de las mozas del pueblo.
En algunos pueblos como Mave se cantaban “Los Mandamientos” con los  que los mozos, hace años, pedían para cera de la iglesia. Una vez comprada la cera para todo el año, el párroco les obsequiaba  con unas gallinas o un cordero para celebrar un convite.

“Que limosna nos han dado para alumbrar el cordero,
que Dios se lo pagara en el reino de los cielos”






Los grupos estaban compuestos por varones, ya que la costumbre de las marzas no consentía más que a mozos solteros, por ser este "un derecho indiscutido de todo mozo soltero" (a excepción de las Pascuas de Resurrección, en las que solían intervenir cuadrillas mixtas de mozos y mozas). Estos grupos  constituyen el principal soporte organizativo y estructural de las marzas, están formados por cuadrillas o comparsas que reciben los nombres de marzantes o marceros. A veces estas cuadrillas de marceros, si los mozos tenían conflicto entre ellos y no salían a rondar, eran sustituidas por comparsas de hombres casados.

Actualmente “El Coro Ronda Aguilar” en la zona de Aguilar de Campoo,  se ha encargado de recuperar las tradicionales marzas. Es un grupo que está activo durante todo el año, además de cantar las marzas por toda la provincia, el Coro Ronda Aguilar participa en una cuarentena de eventos anuales, tanto tradicionales, como festivos, culturales y religiosos.






Fuentes: Cancionero  de la Montaña palentina de Luis Guzmán Rubio,Cancionero del Norte de Palencia de Joaquín Diaz,Internet


















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miércoles, 20 de febrero de 2013

EL PERNALES





“Eres más malo que el Pernales” solía decir la señora Irene cuando reprendía a algún chiguito del barrio .Era una vecina anciana, que de pequeña había escuchado las historias que contaban del bandolero apodado “El Pernales”.
Algunas trataban al bandido como al Robín Hood español, en cambio otras decían verdaderas atrocidades sobre su persona y sus fechorías. Sea como fuere, es un personaje que ha dado mucho juego a la literatura popular y a las coplas y romances que dé él se han escrito. Veamos una pequeña biografía del Pernales.

Francisco Ríos González nació el 23 de julio de 1879 en Estepa, Sevilla en un ambiente  de miseria y pobreza. Como la mayoría de los campesinos andaluces Pernales no recibió instrucción alguna en la escuela y a los diez años trabajaba de cabrero con su padre. Como el hambre apretaba los estómagos vacíos de la familia, cometieron algunos robos en los campos vecinos, sufriendo algún encuentro con la Guardia Civil. Trabajó después como cuidador de caballos, pero su padre continuó dedicándose al robo, y en uno de ellos murió en un encuentro con la Benemérita. Francisco, su hijo juró vengarse. Era un tipo de metro y medio con muy mal carácter.
El 25 de diciembre de 1901 se casó en Estepa con María de las Nieves Pilar Caballero, cinco años mayor que él, con la que tuvo dos hijas, aunque años más tarde ésta lo abandonó al parecer por los malos tratos que recibían ella y sus hijas de Pernales.

Comenzó el bandolerismo asaltando cortijos y a gentes acaudaladas, aumentando su fama. Al principio se le empezó a llamar Pedernales, debido a su dureza, como demostró con sus hijas a las que, parece ser, quemó con un cigarro al molestarle su llanto, o violando a una mujer en el cortijo de Cazalla. El apodo derivó en Pernales, como sería conocido. Su fama se extendió no sólo por Andalucía sino que llegó hasta Madrid. Intentó huir a América con su nueva amante con la que tuvo una hija, pero no lo consiguió. Durante años la Guardia Civil le acosó continuamente hasta que el trágico 31 de agosto de 1907, cuando tenía 28 años, en el paraje del Arroyo del Tejo, cerca de Villaverde de Guadalimar, en la Sierra de Alcaraz, fue sorprendido por el Teniente Haro y sus hombres mientras comía en un olivar con un compañero de su partida, el Niño del Arahal, y tras un tiroteo por ambas partes cayeron los dos bandidos muertos a tiros.






Sobre El Pernales se escribieron folletines,  novelas, romances y todo tipo de publicaciones, pues era considerado el último bandolero español. Aparte de quedar la leyenda de que robaba a los ricos para dárselo a los pobres. Por cierto en el cementerio de Alcaraz (Albacete) donde se encuentra enterrado, hay una tradición que dice que su tumba siempre se encuentra con flores.

Entre las grabaciones del “ Romance del Pernales” que se han hecho, está la que editaron Nuevo Mester de Juglaría en 1975, quizás la más conocida y posiblemente la mejor realizada. También han  cantado versiones del “Romance del Pernales” Manuel Luna –que escuchamos en el video de abajo-, La Ronda de Motilleja, Nacho González y los grupos folk Tradición y El Tardón entre otros.
Entre las publicaciones actuales sobre el Pernales, se encuentran las de la revista albaceteña Zahora con ediciones especiales, una de ellas de 1990 en la que se recrea en forma de comic la muerte del Pernales. La misma revista Zahora en el nº 47 publica un especial  titulado “El Pernales el último bandolero”, cuyo autor es Antonio Mata Martínez. Se puede encontrar en Internet en formato PDF, al igual que muchos artículos y blogs sobre Francisco Ríos González “El Pernales”.





"Ya mataron al Pernales
ladrón de Andalucía
el que a los ricos robaba
y a los pobres socorría"
(Copla popular)

            


Fuentes: Romanceros populares e Internet





jueves, 14 de febrero de 2013

La Torre de Tariego




Tariego de Cerrato se encuentra situado a 14 Km de la capital palentina, muy cerca de Venta de Baños.
Del antiguo castillo de Tariego de Cerrato, apenas quedan unas piedras al lado de una torre, que nada tiene que ver con el antiguo castillo. Inicialmente la torre se empezó a construir en el emplazamiento del castillo, aunque después se cambió a su ubicación actual, en la cuesta de la Butrera, al ser un punto más elevado que el primero. Ubicada al oeste de la población sobre un cerro horadado por multitud de viviendas rupestres, es visible desde cualquier punto de la localidad. Esta torre está edificada con una combinación de sillares de caliza, mampostería y ladrillos. Es de planta cuadrada de siete metros de lado y tres pisos de altura.  Fue construida durante la Segunda Guerra Carlista por el ejército de Isabel II.
Hoy el estado que presenta la torre es muy lamentable. Se encuentra resquebrajada verticalmente en las fachadas Norte y Sur debido a un ligero hundimiento de parte de la base.
La torre pertenecía a la red de Telegrafía Óptica de Castilla, la cual comunicaba Madrid con el Norte de España (La torre nº 1 estaba en la Puerta del Sol en Madrid y la nº 52 y última en Irún). La de Tariego tenía el número 21 y era conocida como “La Buitrera”. Con el nº 20 figuraba la que había en Dueñas y con el 22 la que estaba en Villamediana.
El telégrafo óptico estaba basado en dos señaladores, uno exterior y otro central, que se desplazaban hacia arriba o hacia abajo sobre un bastidor con franjas horizontales para marcar las posiciones. El indicador exterior  era una esfera que actuaba como señalador de servicio y admitía 6 posiciones como por ejemplo niebla, avería, ausencia en la torre, etc.
El otro señalador, el central era el que propiamente marcaba el mensaje. Se trataba de un cilindro que se desplazaba verticalmente y según su posición respecto a las franjas laterales  marcaba un número del 0 al 9 además de una posición de “repetición” y otra de “error”. El desplazamiento de los señaladores era muy sencillo puesto que se hacía desde el interior de la torre mediante un volante marcado con los números que indicaban las posiciones, por lo que la transmisión era muy rápida y sólo requería de dos hombres, uno para observar la torre anterior y anotar el código y otro para ir manejando los señaladores de manera que confirmara la correcta recepción del mensaje y transmitiera a la siguiente torre el código numérico.
El telégrafo óptico español estuvo concebido desde su inicio como un instrumento al servicio del estado y del ejército por lo que no se permitía su uso privado. Comenzó a operar en 1844 y se abandonó definitivamente en 1857 cuando se ordenó la retirada del personal de las últimas torres, tras rendirse los últimos escépticos en nuestro país a la evidencia de la superioridad del telégrafo eléctrico.
Según recogía Madoz, un mensaje podía ser enviado de Madrid a Irún en unas tres horas lo que supondría una velocidad de unos 185 km por hora. Evidentemente aunque la afirmación de Madoz es previsiblemente optimista y válida sólo en condiciones de perfecta visibilidad y transmisión, el dato es impresionante por sí mismo.


Coordenadas de la Torre de Tariego:
 GEO WGS84 Lat. 41º 54' 12" N. Long. 4º 28' 35" W
Fuentes:      -Historias y leyendas palentinas de F.Roberto Gordaliza http://telegrafiaoptica.wikispaces.com,http://telegrafooptico.org/,http://www.castillosdepalencia.es/


  

sábado, 9 de febrero de 2013

Estar en Babia





Se dice que estar en Babia es estar distraído y ausente, pero ¿qué es Babia?
Pues bien, Babia es  una comarca de la montaña de León que es Reserva de la Biosfera desde el 29 de octubre de 2004. Limita al Norte con los concejos asturianos de TevergaSomiedoQuirós y Lena. Al Este con la comarca de Luna. Al Sur con la comarca de Omaña y al Oeste con la comarca de Laciana.
El fondo del valle de Babia es amplio, rodeado de cumbres que rebasan los 2.000 metros de altitud, valles moldeados por glaciares. Destaca por su altitud y majestuosidad el macizo de Ubiña, con Peña Ubiña de 2.414 metros.
Los dos ayuntamientos de la comarca son Cabrillanes y San Emiliano, en los cuales están englobados  un buen número de pueblos.
En la Edad Media, los reyes de León gustaban de pasar largas temporadas de verano en esta comarca. Babia era una zona placentera, bien abastecida y bien comunicada, con gente pacífica leal al rey y además buen territorio de caza.
Los reyes se encerraban en Babia muchas veces, huyendo de las intrigas de la Corte y de las ambiciones de nobles y prelados empeñados en instaurar la modalidad feudal.
A veces, los fieles súbditos leoneses echaban de menos a su monarca ausente, mientras los intrigantes repetían: “El rey está en Babia”. Y con esto daban a entender que su Alteza no quería saber nada de nada, parecido al de ahora cuando se va a cazar elefantes….






martes, 5 de febrero de 2013

Refranero de Febrero



En febrero, un rato al sol y otro al brasero
En febrero busca la sombra el perro, pero a últimos, no a primeros
En febrero loco, ningún día se parece a otro
En febrero sale la lagartija del agujero
Febrero, febrerín, el más corto y el más ruin
La flor de febrero no va al granero
Febrero, el mes más largo cuando no hay dinero
Mal año espero si en febrero anda en mangas de camisa el jornalero
Cuando llueve en febrero se llena el granero
Abrígate por febrero con dos capas y un sombrero
Cuando la Candelaria plora, el invierno está fora,  pero si no plora, ni dentro ni fora

Por San Blas, una hora más
Por San Blas, planta higos y comerás
Por San Blas, la cigüeña verás, y si no la vieres, año de nieves







Nana de la Cigüeña
 
 
Que no me digan a mí
que el canto de la cigüeña
no es bueno para dormir.
 
Si la cigüeña canta
arriba en el campanario,
que no me digan a mí
que no es del cielo su canto.
 
 
Rafael Alberti